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Mallorca

En el noreste, aguas cristalinas rodeadas de pinos. Una playa amplia, pero con carácter natural.

Kilómetros de arena fina, mar en calma y todos los servicios. Ideal para largas jornadas de sol.

Una de las playas más conocidas por su estilo virgen. Arena blanca, aguas claras y entorno protegido.

Celebración tradicional de fuego y música. Se vive con intensidad en los pueblos del interior.

Galerías abiertas y arte en la calle. Ideal para descubrir otra cara de la capital.

Competición náutica internacional con ambiente deportivo y elegante en la bahía de Palma.

Ruta entre montañas, pueblos históricos y miradores al mar. Es el lado más auténtico de la isla.

Interior de la isla con sorpresa subterránea. Música y agua en un espacio natural único.

Uno de los pueblos más bonitos de España. Piedra, vegetación y tradición a pocos kilómetros de Palma.

Sopas mallorquinas, tumbet o frito. Cocina de casa que sigue vigente en muchos restaurantes.

Ensaimada y sobrasada: los dos sabores que no faltan en cada escapada.

Tapas, pescado fresco y platos sencillos con sabor. En mercados o terrazas, sin prisas ni protocolos.